BARCELONA - CINE ODEON (1921-1981)
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La mayor sala de cine que tuvo el barrio de Sant Andreu de Palomar a lo largo de su historia fue el cine Odeón. Estaba situada en el paseo de Fabra i Puig, conocido popularmente como la Rambla, haciendo esquina con la calle de Nadal.
El local fue abierto a principios de 1921 y disponía de un aforo notable que se acercaba a las 2.000 butacas y que lo situaba entre los más grandes de ciudad.
En sus inicios actuó como teatro y en él se habían visto incluso óperas. Así, en febrero de 1927 se representaba La Africana, a cargo de la compañía del Gran Teatre del Liceu, con el debut del barítono Joan Fonoll. Los tranvías para ir al Odeón desde el centro de la ciudad salían de la calle Trafalgar.
El local fue abierto a principios de 1921 y disponía de un aforo notable que se acercaba a las 2.000 butacas y que lo situaba entre los más grandes de ciudad.
En sus inicios actuó como teatro y en él se habían visto incluso óperas. Así, en febrero de 1927 se representaba La Africana, a cargo de la compañía del Gran Teatre del Liceu, con el debut del barítono Joan Fonoll. Los tranvías para ir al Odeón desde el centro de la ciudad salían de la calle Trafalgar.
1927.- Crónica publicada en La Vanguardia del 27 de febrero sobre la representación de la ópera L'Africana en el Odeón de Sant Andreu.
Posteriormente el local se fue consolidando como sala de cine y en los años de la República tenía un aforo de 1.800 localidades. Eran muy conocidas las sesiones matinales musicales del Odeon, mientras que las tardes del domingo era habitual lugar de encuentro de familias.
Durante los primeros años de la dictadura franquista la oficialidad del régimen aprovechó la gran capacidad de la sala para promover todo tipo de actos de exaltación de los valores fascistas y actos de afirmación a Franco y Falange. Por otro lado, era también el local preferido durante la celebración de la Fiesta Mayor del barrio para ofrecer actos y representaciones teatrales. La ópera y la zarzuela tampoco faltaron durante los años 1940's y el 5 de diciembre de 1952 los andreuenses tuvieron la oportunidad de ver actuar en la gran vedette del momento Carmen de Lirio.
Ese mismo año la sala había sido reformada en profundidad por el propietario José Coll Navarra que, pese a reducir el aforo dejándolo en 1600 butacas, mejoró ostensiblemente las condiciones de visibilidad de todo el local y la decoración interior. Estas reformas fueron proyectadas por el arquitecto Joan Pujadas Porta.
Reanudada la actividad, El Odeón continuó como sala de reestreno ofreciendo dobles programas en sesión continua. Por último, el domingo 14 de junio de 1981 este cine mítico de Sant Andreu cerró puertas para siempre. El último programa doble proyectado incluía El factor humano y Mujeres de Cabaret. Luego parte de su gran estructura fue aprovechada para dar cabida a un gran mercado que aún conserva el nombre del cine.
Durante los primeros años de la dictadura franquista la oficialidad del régimen aprovechó la gran capacidad de la sala para promover todo tipo de actos de exaltación de los valores fascistas y actos de afirmación a Franco y Falange. Por otro lado, era también el local preferido durante la celebración de la Fiesta Mayor del barrio para ofrecer actos y representaciones teatrales. La ópera y la zarzuela tampoco faltaron durante los años 1940's y el 5 de diciembre de 1952 los andreuenses tuvieron la oportunidad de ver actuar en la gran vedette del momento Carmen de Lirio.
Ese mismo año la sala había sido reformada en profundidad por el propietario José Coll Navarra que, pese a reducir el aforo dejándolo en 1600 butacas, mejoró ostensiblemente las condiciones de visibilidad de todo el local y la decoración interior. Estas reformas fueron proyectadas por el arquitecto Joan Pujadas Porta.
Reanudada la actividad, El Odeón continuó como sala de reestreno ofreciendo dobles programas en sesión continua. Por último, el domingo 14 de junio de 1981 este cine mítico de Sant Andreu cerró puertas para siempre. El último programa doble proyectado incluía El factor humano y Mujeres de Cabaret. Luego parte de su gran estructura fue aprovechada para dar cabida a un gran mercado que aún conserva el nombre del cine.
Según el anuario del cine español 1955-56, estaba ubicado en la calle Nadal, 2, del barrio de San Andrés. El empresario era Miguel Coll y su aforo de 2.252 localidades.
Colaborador: Paco Moncho