VALENCIA - CINE ZAPADORES (quedó en proyecto)
Esta podría ser una historia curiosa de la ciudad de Valencia con cinema de por medio. En 1950 los hermanos Vicente y Carmen Carbonell Folgado solicitaron licencia de obras para la construcción de un edificio de cinco plantas de viviendas en la calle Zapadores nº 47, que es el que aparece en primer termino de la foto de Google. Ya en 1956 los citados presentaron un nuevo proyecto del arquitecto Salvador Pascual Gimeno, esta vez para la construcción de un cinematógrafo que estaría ubicado en un patio interior, detrás del citado edificio, y cuya entrada la tendría por una estrecha casa de la misma propiedad situada en el nº 43 de dicha calle, compuesta de bajo y vivienda (ver plano), contando con salida de emergencia por la de Montichelvo. Según el plan, se trataba de un salón cinema de planta baja con cubierta a base de cuchillos y teja de cerámica sobre estructura de madera que sería acondicionado a base de 30 filas de butacas, con dobles hileras de 20, pasillo central y dos laterales, así como hall de entrada y salida, servicios y tres accesos a la sala de proyección y cabina situada al fondo en plano superior. El aforo se estimaba en 1220 localidades. Pues, bien; recibido el visto bueno por parte de los responsables del Ayuntamiento no se sabe el por qué el cine nunca llegó a construirse, aunque viendo la foto aérea de Google da la impresión de que la nave ya existía. Este no es un caso aislado y en los archivos municipales existen algunos proyectos más de cines que no se llevaron a término. Se da la circunstancia de que frente por frente a la que hubiese sido la entrada del local se situaba el acceso principal al Cuartel de Ingenieros que había sido construido en 1921 durante la dictadura del General Primo de Rivera. Podría haber influido el hecho de que dentro del recinto militar, repleto de soldados, se decidiera instalar un cine en el local del bar, aunque hemos constatado que este hecho podría ser posterior al final de los años 50. Nos cuenta un vecino octogenario que por entonces trabajaba en un establo de cerdos en este antiguo barrio de la estación de En Corts, que éste estaba un tanto despoblado. Por otra parte, habla maravillas sobre el buen hacer de un médico de niños radicado por allí.
Colaborador: Severiano Iglesias Tortosa