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Se trata de uno de los primeros coliseos que hubo en esta ciudad. Inaugurado el 6 de mayo de 1838 estuvo ubicado en la calle Arcillero y en su escenario se hicieron representaciones de géneros menores como sainetes, juguetes cómicos, bailes de carnaval, pero sobre todo zarzuelas. Fue reformado entre 1893 y 1894 quedando con capacidad para unos 880 espectadores repartidos en tres pisos con forma de galería y en el patio de butacas. Está considerado como el primer cine estable que hubo en la ciudad, ya que en el invierno de 1897 se dedicó a proyectar cine mudo por medio de explicador y piano. Tras 77 años de vida activa en la madrugada del 30 de octubre de 1915 sufrió un incendio. Después fue reconstruido casi en su totalidad para ser sede del Ateneo hasta el pavoroso incendio acaecido en Santander en 1941, cuando el edificio quedó nuevamente dañado y la organización se trasladó a su actual ubicación, donde había estado el Salón Variedades inaugurado el 24 de octubre de 1906. El fuego incontrolado, azotado por el fuerte viento reinante, destruyó gran parte de la ciudad, especialmente su casco histórico. Este hecho fue llevado al cine con el título `Santander la ciudad en llamas`.

Colaborador: Severiano Iglesias Tortosa